Ese día, mostré a mis compañeros todas las aplicaciones, plataformas y recursos tecnológicos educativos que había aprendido en Florencia, donde tuvo lugar el curso estructurado que elegí.
No fue tarea fácil puesto que no forma parte de mi especialidad pero he de admitir que la paciencia y comprensión que mis compañeros mostraron fue más que suficiente para que me relajara y me lanzara con ejemplos y tareas que yo misma había elaborado y así proporcionar a mis compañeros la base con la que pudieran investigar y poner en práctica algunos de estos recursos.